miércoles, julio 13, 2005

El carnaval de disfraces

En estos días en San Luis, camino unas diez cuadras desde el hotel donde paro al lugar donde trabajo . Hoy, por la calle San Martín, a la altura del 600, presencié un carnaval inesperado, fuera de fecha, aunque no se si tan fuera de lugar.
En parejas, no muy ordenadas, como mini comparsas, pasaban como desfilando los azules de la policía provincial, los azul con naranja de la policía que ordena el tránsito, los verdes de la seguridad comunitaria, los camuflados con boina del ejército, los campera azul con equipos de cobranza al cuello del servicio de tarifado de parquímetros, los chalequitos multicolor de los planes trabajar limpiando las plazas y las calles, y hasta un par de bordós, cuya actividad no era muy clara, con la leyenda Municipalidad de San Luis.
Todo eso en sólo una cuadra, pero el panorama se repite con leves variaciones en toda la zona céntrica de la ciudad.
¡Lindo corso puntano!

martes, julio 12, 2005

San Luis (DC)

Todas las mañanas, en San Luis capital, un grupo silencioso y paciente se dedica a limpiar las plazas Pringles e Independencia. Hasta allí nada especial, sólo que también manguerean las veredas utilizando grandes cantidades de agua. ¿Qué pensarán los vecinos de San Antonio, San Vicente, San Pedro y otras localidades aledañas? Están a lo sumo a 100 km de la capital pero allí el agua es una cuestión seria. Un vaso de agua de más podría provocar una mirada furibunda...y no es para menos: a veces se quedan sin tomar nada por un par de días.
¿No será hora de cambiar prioridades?

lunes, julio 11, 2005

Sierra de las Quijadas, San Luis

Muchas veces necesitamos cambiar de entorno para recordar qué cosas son realmente importantes. Cosas que a diario no les prestamos atención, por considerarlas obvias, commodities.
Potrero de la AguadaEn el Parque Nacional Sierra de las Quijadas y en las poblaciones aledañas el agua es un bien escaso y muy valioso; no hay arroyos, ni bañados ni lagunas salvo las aguadas, que son pozones donde generalmente se acumula el agua de las lluvias, pero como la tierra tiene mucho salitre no es apta para consumo. Las lluvias no son frecuentes y cuando ocurren es necesario acopiar la mayor cantidad posible, tanto para los animales como para las familias que habitan la zona. Otra posibilidad es esperar que llegue el camión cisterna de la provincia, que aún es menos frecuente que las lluvias. O comprarla...

A veintidós kilómetros del parque, camino a San Luis capital, se encuentra el poblado de San Antonio, tan poco ameno como el entorno, salvo por la gente de allí habita. Entre ello tiene su casa, similar a las otras excepto por un detalle, el Margarito. En medio de tanta aridez, La flor del Margaritode tanta desolación y abandono, tiene plantada una rosa roja, bien regada y cuidada. Cuando le pregunté por ella, me contestó con una amplia sonrisa en el rostro: porque es hermosa.

Miré a mi alrededor, miré esa páramo de tierra yerma, rasa, desabrida y creí comprender a esa alma.

domingo, julio 10, 2005

Añoranza de lo que nunca fue

Si hoy no prefiero los jardines a los sótanos no es porque mi gusto halla cambiado. Sólo en los sueños las cosas que deseamos son perfectas. La realidad se encarga de que apenas sean pálidos reflejos borrosos de lo que concebimos en esa fantasía, en esos deseos o esperanzas, que llamamos sueños. Entonces, soñar para qué.

Ya no tolero demasiado nada. Llevo como una carga cada instante del día, cada actividad que hago, cada persona con la que trato, cada una de las cosas que acontecen a mi alrededor. Incluso las que no suceden, por ausentes, hacen que el momento sea insoportable.

Siento el paso
del incesante tiempo
con dolor sordo.